AGO

La Cipollini AGO es la bici de gravel de la casa italiana. Remarcamos lo de casa italiana porqué desde la marca es algo que ponen muy en valor, empezando por su fabricación, que, exceptuando las ruedas, se fabrica íntegramente en Italia.

El enfoque de esta Cipollini AGO, al igual que muchas marcas que solamente tienen un modelo de gravel, es versátil y polivalente. Una bici que pueda abarcar el máximo de usuarios posibles.

Esta polivalencia y versatilidad es algo que vemos en su geometría. Neutra y sin radicalidades, ofreciendo una posición cómoda al usuario que debería facilitar sumar horas con ella. Sin embargo, la longitud de las vainas traseras, harán que, si lo necesitamos, tenga esa reactividad necesaria para los más rápidos o aquellos que busquen una bici algo más ágil.

El cuadro de esta Cipollini AGO es un monocasco de carbono. Esto quiere decir que es de una sola pieza, un aspecto importante en cuanto al comportamiento y la rigidez de la bici. Además, con tan solo 930 gramos el cuadro y 510 gramos la horquilla, han conseguido uno de los framesets más ligeros del mercado. Todo ello con anclajes de bikepacking y todo.

La tija del sillín, también de carbono, se integra de forma realmente orgánica, ocultando cualquier tipo de abrazadera o tornillo. Queda todo integrado bajo una goma protectora con el logo de la marca. Esta tija, tiene un offset de 10mm y un peso de 110 gramos.

En cuanto a polivalencia y versatilidad, el paso de rueda de esta Cipollini AGO acepta cubiertas de hasta 700x45mm. Un valor que tiene sentido en bicis de fast gravel o Allroad, pero que, para bicis polivalentes o versátiles, estamos viendo que la tendencia del mercado es ampliar este valor.

Los montajes de Cipollini suelen ir de acuerdo con la filosofía italiana y todo queda en casa. Lo vemos en el grupo escogido, el Campagnolo Ekar de 1x13 velocidades (mecánico). Configurado en este caso con un plato de 38T y un cassette de 9-42T. En cuanto a los discos, de serie ya viene con 160mm, un buen acierto.

Las ruedas, en este caso, también siguen la misma tendencia y encontramos la Campagnolo Levante. Unas ruedas de carbono con 25mm de ancho interno y 1485 gramos de peso (el par).

Más allá de lo mecánico, está lo estético, y los italianos de esto saben bastante. El cuadro ofrece una estética limpia, con toques clásicos pero muy bien integrados. Encontramos unos colores llamativos, combinados con secciones de carbono visto que, en persona, os prometemos que lucen mucho mejor que en las fotos.